Un recorrido turísticamente preparado permite recorrer el parque y disfrutar de su fauna, flora, el arroyo con sus cascadas, espejos de agua y atractivas formaciones rocosas de insólitas conformaciones, debido a los fenómenos naturales (lluvia, viento, etc.) que han ido desgastándolas y erosionándolas. Al comienzo, puede verse un espejo de agua desembocar en la primera gran cascada que es atravesada por un puente colgante. De igual manera, no hay más que desandar el paisaje para encontrarse con caprichosas formas que la naturaleza decidió darle a las piedras, como la Cabeza del Indio o la Cara del Mono.
La Cueva de los pajaritos, no es más que el desmoronamiento de pequeñas y grandes rocas sobre la profunda grieta que no mide más de un metro y medio en ese sector. Apenas si se cuelan unos rayos de luz, pero entre los escondrijos hay una abertura de suficiente tamaño como para que cualquier persona pueda ingresar a un mirador desde donde es posible observar a las aves.
En el año 2008 fue distinguido como Séptima Maravilla Natural de Córdoba. El lugar nos permite también disfrutar de su complejo turístico, el mismo cuenta con pileta, asadores, proveeduría y sanitarios para pasar el día en familia.
Se encuentra a 12km de Cosquin, por el antiguo camino el Mallín, actualmente calle Gerónico, un camino sin asfalto que es usado como tramo del recorrido para el Rally Mundial.